Cuando perder te puede ayudar a ganar

Por: Jorge Alejandro Pepiche
Director Adjunto de Básquet Futuro Internacional

Pregunto…

¿Cuántas veces nos han invitado a ver un juego de divisiones formativas porqué entre otras cosas un equipo juega muy bien o ambos equipos tienen los mejores proyectos de atletas en desarrollo?

¿No les ha sucedido ver que ese equipo que juega muy bien, utiliza jugadores que rinden muchísimo en posiciones que sabemos que no podrán jugar en un futuro?

¿No les ha sucedido que de pronto un jugador subestimado por el medio, nos deslumbra con una acción impensada y nos hace volar a imaginarlo en otras circunstancias, otra posición u otra responsabilidad en el equipo?

Si la respuesta a estas preguntas es si, mis respetos, son ustedes entrenadores maestros, coaches que se especializan en enseñar a jugar, gran responsabilidad generalmente mal pagada y por ello subestimada.

En mi país, por ejemplo Luis Scola, capitán del seleccionado mayor y power - forward de Houston Rockets, además de su talento y dedicación, tuvo la fortuna en sus años de minibásquetbol de contar con un coach que le permitió, jugar por todo el campo manejando la pelota como un armador y aprendiendo todo tipo de pases y lanzamientos. Daba gusto, a los que pudimos verlo. Como ese niño de 1,90 mts de altura a los 12 años disfrutaba de jugar por toda la cancha y hasta realizaba un coast to coast cada tanto con la habilidad de un niño 40 ctms, mas bajo que él.

¿Ustedes dirán, esto es común? En nuestro medio no.

La mayoría de los entrenadores de formativas en mi país ponen a los jugadores a jugar en donde le da más rédito al equipo sin importar el desarrollo del jugador. ¿Por qué? Porque desean ganar sin importar si los jugadores se desarrollan. No están dispuestos a invertir el tiempo que lleva enseñarles a jugar de acuerdo a sus características y pagar el precio de perder algunos partidos hasta lograr una coherencia que les permita buscar ambos objetivos, tratar de ganar y mejorar los proyectos de jugadores en desarrollo.

Todos sabemos lo importante que es ganar y a todos nos gusta.

¿Pero, estamos dispuestos a pagar el precio de prepararnos para ganar y brindarles la oportunidad a todos nuestros jugadores de tener el crecimiento que se merecen?

Un coach que se caracterice por ser un maestro es aquel que enseña a jugar, a ganar, a perder, a respetar el trabajo, el esfuerzo, la dedicación y el bien común.

Seguramente no serán los más ricos, pero serán los más respetados y se convertirán en referentes por siempre de su ambiente y su comunidad.

Ustedes eligen.